El primer día en un gimnasio significa lo valiente que eres al disponerte hacer un cambio en tu vida. Y está claro que no es un paso fácil, por lo que tal vez atravieses por muchas dudas desde el momento en que lo decides. Sin embargo, no hay cambio al que no nos podamos adaptar.

He aquí algunas de las cosas que debes considerar para tu primer día.

No lo dejes para mañana…hazlo!

Si ya tomaste la decisión no la aplaces ni un solo día, postergarlo solo lo hará más difícil y podrías terminar por abandonar la idea. Simplemente prepárate para dar lo mejor de ti desde el primer momento y no dejes de tener presente cuál es tu objetivo. Recuerda que toda meta necesita tiempo, constancia y dedicación, así que en cuanto te lo propongas ¡hazlo!

Todo es un proceso de adaptación

El primer día puede ser todo lo que esperas o nada de lo que quisieras, depende de ti. El primer contacto con el gimnasio significa que tendrás que acostumbrarte a ciertas cosas, tal vez no podrás enfrentarte a retos fuertes, eso solo con el tiempo. O tal vez querrás no haber terminado tan cansado con el poco cardio que hiciste, pero nuestros organismos son diferentes y aunque podamos o no tener experiencia con el ejercicio, es necesario darle espacio para adaptarse. Por eso es sumamente importante estar asesorado y contemplar cada señal que nos mande nuestro cuerpo.

La batalla es contigo mismo

Está claro que te toparas con todo tipo de personas y a ciertos ambientes que pudieran desagradarte pero recuerda que lo que estás haciendo es por ti y para ti, enfócate en tus rutinas, tus avances y tus metas, no des por sentado que todo se logra con unas horas o que algunas personas han sido bendecidas con un “cuerpo mágico”. Todos progresamos de maneras distintas pero nuestro esfuerzo es el que marca las diferencias.

Prepárate

La motivación es base importante para todo entrenamiento, así que adóptala fuertemente desde tu primer día. Organiza tus tiempos, tu ropa, tus accesorios y hasta la música, todo cuenta. Incluso invitar a alguien a padecer el mismo sufrimiento podría darte la motivación necesaria. No temas a lo desconocido o a equivocarte, la primera vez se vale, así que no dejes de preguntar y de orientarte, realmente nunca dejamos de aprender.

No tires la toalla

Si la situación no salió bien, no te rindas y sigue intentando. Algo pudo haber fallado la primera vez pero no hay nada que no podamos mejorar para cambiar esa mala experiencia, recuerda que de este hábito puedes obtener grandes beneficios. Sigue tan inspirado como este primer acercamiento y al día siguiente aunque amanezcas adolorido  te sentirás más satisfecho. Tranquilo porque el primer día es casi nada de lo que te espera más adelante. Y con el paso del tiempo solo te preguntaras por que no empezaste desde antes.

Cuerpos al Límite tiene las mejores rutinas para tu primer día de entrenamiento, te asesora y te acompaña en tu proceso. Contáctanos para ayudarte, o bien tienes alguna duda en específico, déjanos un comentario.

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